Nuestros niños y niñas de 4 años se han convertido en pequeños hortelanos.
Con ilusión, curiosidad y muchas ganas de aprender han preparado el huerto y han plantado rábanos.
Una experiencia muy enriquecedora que fomenta el respeto por la naturaleza, la paciencia y el cuidado del entorno.
Ahora toca regar, observar y esperar con emoción a que broten los frutos del trabajo realizado.
0 comentarios:
Publicar un comentario